Jesús nos dejó el
sacramento del perdón para que podamos volver a la AMISTAD con Dios y con nuestros hermanos. dios, por medio de los sacerdotes, nos concede su perdón cuando nos arrepentimos de nuestros pecados.
Llamamos
pecado a aquellos comportamientos, actitudes o pensamientos que nos alejan de Dios, de la bondad, de la felicidad...
El sacramento del perdón también recibe otros nombres: Sacramento de la conversión, de la confesión, de la penitencia o de la reconciliación.
Dicho sacramento se inicia con el examen de conciencia y tiene cuatro partes:
1. Arrepentimiento: Desear no haber actuado mal.
2. Confesión: Reconocer los pecados delante del sacerdote.
3. Absolución: Recibir el perdón de Dios a través del sacerdote.
4. Penitencia: Rezar o realizar algún buen comportamiento para mejorar el daño causado.
Después de confesar los pecados, durante la absolución, el sacerdote hace la señal de la cruz mientras dice: "Yo te absuelvo de tus pecados en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo".
Jesús, con sus palabras y sus comportamientos, nos mostró que Dios ama tanto a las personas que siempre está dispuesto a perdonarlos. Para construir el Reino de Dios, también nosotros debemos perdonarnos los unos a los otros.
El perdón a la hora de resolver conflictos nos ayuda a superar las diferencias de una forma pacífica y fraternal.
